En efecto, debido a la indisponibilidad del campo de la UIJ y a lo impracticable del campo de Gaetà Huguet por los hoyos que producen los lanzadores de peso y martillo, que pone en peligro la integridad física de los jugadores, el cuerpo técnico y la directiva se negaron a disputar el partido en dichas instalaciones. Esto hubiera supuesto una sanción económica y deportiva para el club, por lo que se propuso al Moncada jugar en su campo, a pesar del desplazamiento, a lo cual aceptaron.
